El etna es un gigantesco volcán, muy impotante en Europa y uno de los más activos del mundo. Con el tiempo, el eje eruptivo de este vocán se ha desplazado de este a oeste; por lo cual el cuerpo principal del volcán se apoya hoy sobre un zócalo de rocas sedimentaria
s, elevadas por lentos pero continuos y fuertes movimientos sísmicos. Por lo menos ochocientos metros de los más de tres mil que constituyen la altura del Etna, no se deben ya a la continua acumulación del magma, casquijos de lava y escorias volcánicas, sino a la progresiva elevación de la costra del terreno.
Testimonio gigantesco de la actividad de los antepasados del Etna es el hórrido y fascinante valle del Bove, al este del cuerpo principal del volcán, con sus escarpadas paredes de basalto que se yerguen perpendicularmente a más de mil metros de altura. Estas paredes no son más que la parte interna de los grandes abismos por los que se derramaron las corrrientes de lava de volcanes procedentes.
s, elevadas por lentos pero continuos y fuertes movimientos sísmicos. Por lo menos ochocientos metros de los más de tres mil que constituyen la altura del Etna, no se deben ya a la continua acumulación del magma, casquijos de lava y escorias volcánicas, sino a la progresiva elevación de la costra del terreno.Testimonio gigantesco de la actividad de los antepasados del Etna es el hórrido y fascinante valle del Bove, al este del cuerpo principal del volcán, con sus escarpadas paredes de basalto que se yerguen perpendicularmente a más de mil metros de altura. Estas paredes no son más que la parte interna de los grandes abismos por los que se derramaron las corrrientes de lava de volcanes procedentes.
El Etna está formado además de por los dos cratéres principales, por más de novecientos conos de adventicios que se han ido formando a lo largo del tiempo.
Aquí podemos encontrar otros datos de interés sobre dicho volcán.
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